La era dorada del podcast, claves y ventajas
Es un hecho que el vídeo es el contenido predilecto de los consumidores, pero desde hace varios años el audio está siendo un fenómeno en alza, en especial los podcasts. Éstos son publicaciones digitales sonoras que se publican periódicamente y pueden escucharse en streaming en algunas plataformas o descargarse. A menudo tiende a confundirse con la radio digital pero, al contrario de esta, el podcast se graba y edita digitalmente y, salvo raras excepciones, se caracteriza por ser atemporal y multiplataforma.
De acuerdo con el Estudio General de Medios, estos contenidos cuentan con cerca de 1 millón de oyentes diarios en nuestro país. Esto quiere decir que un 10% de los españoles que consumen audio online optan por este formato. Es más, según el Digital News Report, elaborado por Reuters, España se consolida como el país europeo más aficionado a los podcasts. Esto lo sitúa 10 puntos por encima del promedio de consumo en nuestro continente. En cuanto al perfil medio del oyente, el EGM apunta a que es un hombre menor de 45 años y con recursos económicos altos.
Las claves del éxito de los podcasts (3Ws)
Variedad de contenidos (Whatever)
Al igual que, según se dice, hay un libro para cada persona, podemos encontrar un podcast para cada consumidor. Se calcula que en la actualidad existen cerca de 2 millones de podcasts distintos de temáticas muy variadas. En esta gran diversidad reside uno de los motivos de su popularidad.
Según un informe elaborado por Spotify- una de las principales plataformas de escucha-, las razones por las que los españoles recurren a este contenido son: estar informado sobre los temas que les interesan, relajarse y desconectar y aprender cosas nuevas. Curiosamente estas causas coinciden con la categorización de los podcasts según su contenido. Así nos encontramos con: podcast de entretenimiento (que incluyen ficciones sonoras, reseñas o críticas audiovisuales y programas de humor, entre otros); podcast formativos (se refiere a aquellos que buscan ampliar los conocimientos del oyente sobre una determinada materia, ya sea idiomas, finanzas o desarrollo personal); y podcasts informativos (aquellos cuyo contenido está ligado a la actualidad y su objetivo es el mismo que el de un boletín radiofónico tradicional). Estos últimos pierden su característica atemporalidad pues la vigencia de su contenido es mucho más pasajera al estar directamente relacionados con los sucesos más importantes del presente.
Consumo en itinerancia (Wherever)
Una de las grandes diferencias entre este formato y la radio tradicional es que el oyente tiene pleno control sobre los detalles de consumo del producto. El modelo clásico obligaba a que la escucha fuese en unos lugares determinados, donde se pudiese recibir señal e instalar un aparato que la captase; el podcast, al descargarse, puede reproducirse en cualquier lugar y desde una amplia variedad de dispositivos. Curiosamente, se ha comprobado que dos de los picos de consumo de podcast más elevados coinciden con una hora antes de la entrada y salida del trabajo. Es decir, el consumo se realiza durante los desplazamientos a este lugar. Una prueba clara de esto es que, durante el confinamiento, al incrementar el teletrabajo e interrumpirse la movilidad laboral, las escuchas decayeron notablemente.
Carácter atemporal (Whenever)
El último de los motivos es complementario del anterior. La radio tradicional, al emitirse en directo, obligaba a la escucha sincrónica. Con el podcast, el oyente es el que decide en qué momento va a reproducirlo, si quiere pausarlo, adelantarlo o volver a atrás. Este es el motivo de que la inmediatez de sus contenidos se relegue a un segundo plano y, como norma general, se opte por temáticas que puedan perdurar en el tiempo.
Además, al no requerir atención plena, pueden consumirse mientras se realizan otras actividades. Por último, su duración no se ve tan limitada como en el modelo clásico y permite la variación según su target, temática y periodicidad de publicación.
¿Cómo puede usar una marca los podcasts?
Debido a su popularidad cada vez son más las empresas que han decidido emplear este canal como medio de promoción. Uno de los motivos es la gran aceptación que despierta este frente a otros canales. Según una encuesta realizada por Podstars, el 60% de los oyentes ve como algo positivo que las marcas se anuncien en su programa favorito. Asimismo, cerca del 15% declara haber comprado algún producto recomendado en un podcast y más del 50% asegura haber visitado la web de los anunciantes. Existen varias formas en las que una marca puede emplear este canal:
Anuncios pregrabados
Son los mismos que se empleaban en el modelo radiofónico clásico, mensajes publicitarios producidos por la marca que se reproducen antes, durante o después del podcast. Suponen quizás la peor opción pues son intrusivos, interrumpen la experiencia del consumidor y, al estar protagonizados por alguien ajeno al programa, tienen un nivel de atención y aprobación más bajo.
Publicidad nativa
Son aquellos anuncios a los que da voz el propio presentador del podcast. Es mucho mejor recibida. La fórmula que mejor conecta con la audiencia es aquella que introduce un call to action, ofreciendo códigos de descuento o meses de prueba en un determinado producto o servicio.
Patrocinio
Optar por cubrir parte de los gastos de producción de un programa realizado por terceros. Si la temática de un podcast cuadra con los valores de una marca esta es una buena opción para incrementar tus clientes. El inconveniente es que no controlas la narrativa y la comunidad realmente es de sus creadores.
Branded podcast
Es la opción que más trabajo da pero también la que más beneficios puede aportar a una empresa. En lugar de aprovechar el trabajo generado por otros, la marca produce su propio podcast, controlando todos los aspectos del mismo. Como cualquier branded content, no se trata de un anuncio sino de un contenido relacionado con la marca y que sirve para desarrollar la narrativa de la misma. La mayoría del branded podcast apuesta por un enfoque de entretenimiento o divulgativo, pero siempre evitando caer en algo excesivamente promocional.
Ventajas de contar con un podcast
Te permite tener una identidad sonora
Mediante un podcast tus clientes le podrán poner voz a tu empresa. Los textos y anuncios se perciben como algo frío e impersonal. Un formato en audio humanizará tu marca, rompiendo las barreras virtuales. De este modo, tus clientes lo percibirán como un contacto más cercano y fomentará un vínculo emocional. Algo que tiene un impacto positivo en la imagen de marca. Además, se ha demostrado que los oyentes recuerdan las marcas que están detrás de sus podcasts favoritos.
Consumo fácil
La celeridad de la sociedad actual hace que nuestro tiempo de ocio sea escaso. El podcast es un producto ideal para capturar a audiencias saturadas de información. El motivo es que este formato agiliza el consumo de contenidos, requiriendo menos concentración e interfiriendo poco en nuestra rutina. Quizás esta sea la explicación de que un 22% de los consumidores, según señala la BBC, se enganchan más a marcas escuchando podcasts que viendo la televisión.
Crea comunidad
El podcast genera comunidad con mucha facilidad, pues asocia a personas con intereses o inquietudes comunes. Su formato permite asociar tu marca a unos gustos, intereses o estilos de vida concretos. Esto favorece los nichos o micronichos de tu negocio, debido a que te acercará a personas interesadas en lo que ofreces que puede que no te conozcan
Genera mayor engagement
La mayoría de formas de publicidad online apuestan por los impactos rápidos, mientras tanto el podcast opta por una mayor duración. Al contrario de lo que podría esperarse, esta, unida a su periodicidad regular de publicación, facilita la atracción y fidelización de clientes potenciales.